La pony malta nos ha acompañado
desde tiempo inmemoriales; cuentan las
leyendas muiscas que los caciques en los días de solsticio frecuentaban bañar
el cuerpo de sus doncellas en burbujeante y carmín liquido de malta, y que su
símbolo, el caballito rampante, fue el
que confundió a los nativos cuando ingenuamente consideraron los jinetes españoles con enviados
celestiales.
Pero sin necesidad de ir más
lejos podemos decir que la pony malta es la bebida más importante en el
territorio nacional; por sus múltiples cualidades nos sirve para
todo. Si estamos enfermos de la
barriga o ahítos y con gases nada mejor
que una pony malta para la mejoría. Ni
el Ensure, ni las dietas balanceadas ni mucho menos el Herbalife y sus congéneres
“life” suplen las necesidades energéticas de las personas convalecientes en los
hospitales, no hay nada que reconforte a un enfermo que una pony malta con un par de galletas Ducales. Gracias a sus componentes altos en carbohidratos
y enzimas enzimáticas es el remplazo ideal cuando la plata no alcanza para un
almuerzo ejecutivo o cuando la hora de
la comida ya ha pasado y ningún restaurante de barrio popular queda con platos
de arroz y sopa para la venta; media Colombia creció, progresó y se hizo
grande gracias al poder nutritivo de la pony malta y un pan de mil, por algo es la bebida de campeones. También es la bebida ideal para calmar la sed, hacer
creer que estamos tomando cerveza con los amigos cuando nos estamos purgando, tener algo espumoso en la boca mientras se
espera una cita o simplemente porque sí.
Y resulta que en esta
semana, mientras esperaba parqueado en
una esquina, en un inclemente clima de
40 grados centígrados, llegó a mi chat
de Facebook un audio de una de las tantas personas que uno tiene de amigo pero
que a ciencia cierta ni lo son, de modo que no dejó de ser curioso conocer el
contenido del mismo ¿Qué podría ser? ¿Una propuesta laboral? ¿Algo le pasaría a
algún conocido? ¿Una propuesta indecente?? Y
nervioso le di play. Pero no era nada de lo que imaginaba, era la
voz de un hombre que en tono jovial nos advertía
cortésmente que evitásemos a toda costa consumir la pony malta, esto debido
a que en los últimos días habían encontrado un operario de una de las plantas de producción, que se
encontraba desaparecido por varias semanas, muerto en el fondo de uno de los
tanques de almacenamiento, en estado de acaramelado y dulce
descomposición, regando pedazos de su diabética humanidad por
cuanta botella salía de allí, y para dar más veracidad a la historia, afirmaba
que la compañía ya había recogido varios lotes del producto que habían quedado
expuestos al cadáver contaminante, pero algunos ya habían entrado en
circulación, de modo que no sería extraño que termináramos atragantándonos con
medio dedo, un trozo de cuero, la mitad de la oreja o quien sabe que otra parte
de cuerpo, al mejor estilo de los relicarios de reliquias de los santos
medievales.
Una sombra de dudas me
cubrió y un sabor a muerto me quedó en
la boca (aunque la última pony malta la había tomado hacía ya varios meses). Pero no era bueno tragar entero, extrañamente el personaje simpático y amable del audio no se identificaba,
tampoco especificaba en qué lugar había
ocurrido el accidente, quien era el desafortunado y acaramelado difunto, cuándo
había ocurrido el suceso y qué lotes habían quedado contaminados. También me extrañaba que dicha noticia no
hubiese salido en noticias RCN de la mañana, del medio día y de la noche, ni en
el caza noticias ni en el patrullero, ni
mucho menos en estilo RCN, lo mismo que en Caracol, en la gente le pone el alma
con Bancolombia, en la sección deportiva, ni en el minuto de dios de azúcar manuelita,
además la noche anterior había escuchado la mega paranormal y en ella no se había comentado nada; ningún
fantasma, mujer poseída, contactado o conspirador había hablado algo sobre ello….y
eso ya era muy sospechoso.
Pero como todo buen
colombiano, ya estoy un poco desensibilizado ante tanto muerto y accidentes, así
sean en cilindros con pony malta, whiskey o bienestarina , por lo que dejé el
asunto ahí.
Pero para mi sorpresa, al siguiente día ya existían las fotos que la compañía que nos permite
embriagarnos cada fin de semana pretendía encubrir. El cuerpo en descomposición
del hombre, la foto del equipo de
bomberos en los tanques de almacenamiento y varias fotos de una botella con
algo semejante a un pedazo de piel en suspensión en el líquido…la verdad había
sido revelada
¿O no?
Cuando veo las fotos me doy
cuenta que es un nuevo hoax que anda recorriendo la internet y de tal eficacia que me pongo verde de la
envidia. Todo el mundo comenta, todo el
mundo maldice, todo el mundo hace ¡¡ puahf!! dice guacala y coloca carita vomitando. ¿Todo
el mundo tiene que ser tan ingenuo?
Como ya había dicho, la escueta e inespecífica información
del audio daba para desconfiar, las fotos confirmaban que todo era un muy buen
chiste.
En la primera se ve un cadáver en avanzado estado de descomposición, al parecer sin el cráneo en su sitio y con este en la región abdominal, extrañamente el cráneo que aparece tiene un tremendo impacto de arma de fuego en la región parietal, ¿se dio un disparo y cayó en el tanque donde luego se le desprendió la cabeza? Y para completar no se ve lleno de la espuma nutritiva de pony malta, tal parece que el tipo no era un campeón; así que investigando un poco encuentro una de las posibles fuentes de la fotografía, una página especialista en gore, donde no solo está esta foto sino otras tres de la misma persona, no especifica muy bien donde y cuándo fue tomada, solo se sabe que es (o fue) una mujer que fue brutalmente asesinada: la mutilaron, le dispararon en la cabeza y la decapitaron…nada de operarios de Bavaria.
En la primera se ve un cadáver en avanzado estado de descomposición, al parecer sin el cráneo en su sitio y con este en la región abdominal, extrañamente el cráneo que aparece tiene un tremendo impacto de arma de fuego en la región parietal, ¿se dio un disparo y cayó en el tanque donde luego se le desprendió la cabeza? Y para completar no se ve lleno de la espuma nutritiva de pony malta, tal parece que el tipo no era un campeón; así que investigando un poco encuentro una de las posibles fuentes de la fotografía, una página especialista en gore, donde no solo está esta foto sino otras tres de la misma persona, no especifica muy bien donde y cuándo fue tomada, solo se sabe que es (o fue) una mujer que fue brutalmente asesinada: la mutilaron, le dispararon en la cabeza y la decapitaron…nada de operarios de Bavaria.
La siguiente foto muestra un
grupo de bomberos o policías en los tanques de almacenamiento de la bebida,
pero esta imagen ya la había visto, corresponde a la creepypasta de Elisa Lam, una chica canadiense que en el 2013 poseída
por un demonio decidió acabar su vida sumergiéndose en uno de los tanques de
almacenamiento de agua del edificio donde vivía, fue descubierta días después,
cuando los inquilinos sintieron un extraño sabor a pony malta en el agua cuando
se bañaban o cepillaban los dientes.
Y la última fotografía si es
criolla, corresponde a una botella de pony malta con algo dentro ¿Qué puede
ser? Cualquier cosa: un trapo, una hoja,
un trozo de carne teletransportado, la precipitación del líquido…en fin, esta podría ser considerada la prueba
definitiva de que la historia es real, pero falta un pequeño detalle, no hay
identidad de los testigos y no se ve la tapa de la botella, no se sabe si fue
abierta o no.
Después de esto me queda una
sensación de no sé qué, de lo terriblemente fácil que nos dejamos influenciar o convencer
por cualquier noticia por muy ridícula que sea. Comprendo que con cualquier rumor, con
cualquier imagen o cualquier cotilleo se puede montar un alcalde, enmascarar a un asesino de cuello blanco,
exterminar una especie animal o llenar templos de alabanza.
Ojala la gente no responda
igual la próxima vez que circule una nota por el internet o el whatsapp
afirmando que el aire es venenoso, que los perros criollos portan garrapatas
mutantes transgénicas que matan niños y ancianos o que el esmegma al mejor
estilo de cicatricure quita las arrugas.
Nota aclaratoria: Bavaria no
me ha pagado por esta nota, pero por si acaso, si algún ejecutivo lee esto
(cosa que dudo) no me caería mal cualquier chequecito.
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