latecleadera

miércoles, 4 de junio de 2014

Lluvias y tormentas de estrellas.



Hace muchos muchos años existió en la tierra un hombre al que dios en su infinita sabiduría decidió probar.  Llamando a filas  ángeles, arcángeles, serafines, querubines, tronos, potestades, virtudes, dominios y ángeles caídos, a cada uno  le encomendó la tarea de hacerle imposible su efímera vida en este valle de lágrimas.  Este hombre amante de la estadística y los números (por tal razón no es Job, si alguien pensaba que era el) sentado en un rinconcito de su hogar, transcribió una a una todas las leyes que hoy por hoy rigen nuestro diario vivir.  Tardó años en esto y cuando ya vio terminado su trabajo salió de su escondite, se dirigió a una video tienda, alquiló las 13 temporadas con sus 3500 capítulos de padres e hijos, y cuenta la leyenda  que en el capítulo 2033 su cuerpo maltrecho no aguanto más y se volatilizo ante la mirada estupefacta de sus verdugos celestiales. Nadie sabe dónde fue a parar; algunos físicos teóricos formulan hipótesis basándose en algunas pruebas del acelerador de partículas de suiza, donde dicen que entró a un universo paralelo, posiblemente en la séptima dimensión…donde toca el trombón.  

Este hombre era Murphy, el de las leyes de Murphy (otros afirman que era un capitán de la fuerza aérea de los USA que por allá en  los años cuarenta, ante la incompetencia de alguno de sus subalternos dijo aquella frase  “si algo pueda salir mal, saldrá mal”  pero estas solo son conjeturas).   ¿Y a qué viene todo esto?  A las famosas lluvias de estrellas,  aquel fenómeno meteorológico que ocurre unas pocas veces al año, que sirve de relleno en las noticias y que a pocos nos importa.

Todos en algún momento de la vida en un descuido hemos visto cruzar por el firmamento en una noche despejada una estela  de luz bien sea blanca, azul, roja o amarilla, un fulgor luminoso que no dura más de dos segundos,  que como niños de preescolar nos hace exclamar entusiasmados ¡acabó de pasar una estrella fugaz! ¿La vio? y depende de la compañía las respuestas serian: 
-si es un niño  ¿Dónde? ¿Dónde?
- si es la esposa, novia o amante -¿y pediste un deseo? 
- Y si es un amigote – hay tan mariquita-.  
De todas formas no deja de ser algo curioso y agradable y según algunos entendidos en el tema, augurio de buena suerte. 


De modo que cuando nos enteramos que tal noche habrá una fantabulosa lluvia de estrellas, los más fanáticos cuadramos la agenda, nos alistamos para la trasnochada (pues nunca es temprano, siempre es de la media noche en adelante) les comunicamos la noticia a los integrantes de la familia que quieran o no serán participes del evento, y muy a las 10 pm con  equipaje en el baúl del carro, botellitas de agua, paquetes de todito y chitos  se inicia el viaje al lugar de observación astronómica, idealmente un desierto lejos del bullicio y la luz de la ciudad.    Una vez allí, luego de cruzar kilómetros de carreteras solitarias, so riesgo de ser víctimas de la patasola o la madremonte (palabras textuales de una  amiga en uno de aquellos viajes) se arma el sitio de observación, se le informa al niño que llegamos. Pero este en lo más profundo del sueño, hace caso omiso a todo. Y pacientes con la mirada puesta en lo alto, maravillados por el manto estelar sobre nuestras cabezas, esperamos la caída de los primeros meteoros.  Y es en este preciso momento en donde entra a participar Murphy.

El muy infame también postulo sus leyes para la astronomía,  aquí les dejo algunas:

-Un lugar de observación no tendrá más de dos de las condiciones siguientes: Cielos oscuros, horizontes sin obstáculos, suelo firme, o servicios.

Las combinaciones de las anteriores, para cualquier sitio y noche dados, serán exactamente las opuestas de las que serían más útiles para el mayor número de personas.

-La distancia al lugar de observación es directamente proporcional al número de piezas importantes que habrás olvidado llevar.

-La calidad del cielo [incluyendo tiempo, número de nubes, etc...] variará de forma inversamente proporcional al día de la semana que sea; es decir la mejor época de visión caerá invariable en una noche de trabajo, limitando el tiempo disponible para disfrutarlo.

-Durante los más raros acontecimientos astronómicos, tales como tránsitos, ocultaciones asteroidales, o un cometa que pase cerca, le enviarán indudablemente fuera de la ciudad en viaje de negocios, o sucederá un acontecimiento importante de la familia. Cuando no esté sucediendo nada en su vida, nada nuevo sucederá en el Cielo.

-En el caso de que no estuviera fuera de la ciudad, o dedicado a actividades familiares de naturaleza aplastantemente banal, y además el cielo estuviera despejado, el acontecimiento transcurrirá a uno o dos grados de la Luna Llena.

-La posibilidad de que se enciendan luces, linternas, faros, luces interiores o pilotos traseros es directamente proporcional al número de obturadores abiertos y al número de observadores que hayan empezado su adaptación a la visión nocturna.

-Los oculares sufren una atracción magnética irresistible hacia el cemento, a diferencia de los tornillos y tuercas pequeñas que sufren una atracción magnética irresistible hacia la hierba alta.

-Todos los apagones suceden en noches nubladas o de Luna Llena.

-La cantidad de nubosidad es directamente proporcional al deseo del astrónomo de observar.

-La cantidad de nubosidad es directamente proporcional a la disponibilidad del astrónomo para observar.

-La cantidad de cobertura nubosa es inversamente proporcional al porcentaje iluminado de la Luna.

-Bajo cielos parcialmente nublados, las nubes cubrirán exactamente esos objetos que tenga más ganas de observar, dejando otras áreas totalmente libres de nubes.

-De las diez noches de mejores condiciones de visibilidad del año, tendrá que asistir a algún acontecimiento nocturno dentro de casa al menos durante ocho de ellas.

-Según vayan mejorando las condiciones de visibilidad, irán aumentando las demandas de su cónyuge para que vuelva a la cama.

-En invierno, la temperatura es siempre al menos 10 grados menor que aquella para la que se había vestido.

-Durante el verano, la cantidad de mosquitos es siempre un diez por ciento superior a lo que se ha previsto -y para lo que se haya untado con repelente-

-Ley de la Observación Selectiva: La siguiente supernova surgirá en una galaxia que usted observó en la anterior noche despejada.

-Ley de la Declinación Selectiva: El acontecimiento astronómico más interesante del año ocurrirá en una declinación que estará por debajo del horizonte de su lugar de observación.

-Ley de la Vegetación Selectiva: El árbol del vecino se desplazara siempre hacia el lugar exacto necesario para ocultar el objeto que quiere ver.

-Ley del Césped (Variante astronómica): Un elemento óptico que cae lo hará siempre con la cara convexa hacia abajo, excepto si se halla tapado o se tira con el propósito expreso de probar esta ley.

-Ley de la Visión Lateral: El meteorito más brillante de la noche caerá detrás de usted, siendo visible solamente a la gente con quien usted esté hablando en ese momento. (esto se cumple para todos los observadores, incluyendo aquellos con quién estaba usted hablando).

-Principio de la Radiación Lunar: Los observadores de cielo profundo hallaran que las noches más claras serán aquellas en las que haya Luna Llena, cuando la radiación lunar es suficiente para eliminar las nubes y la calima.

-Enigma de la Luz Solar: Con la única excepción de los eclipses solares totales, los diez acontecimientos astronómicos más interesantes del año ocurrirán cuando el sol esté sobre su horizonte, a menos que esté lloviendo.

 De modo que aquella nube lejana en el horizonte, cubrirá el 90% del firmamento en la hora pico de caída de meteoros.  Y así ocurrirá una y otra vez en el transcurso del año,  a excepción de la vez en la cual no se fue, en esa noche, hasta naves extraterrestres se avistaran. Pero como en astronomía nada está dicho, siempre habrá una próxima vez, y si no se ven estrellas fugaces, planetas o nebulosas, al menos si se podrá disfrutar de un agradable paseo familiar a altas horas de la noche. 

Para los interesados les dejo aquí el calendario de “inviernos estelares”

Julio 5 –  Ocultación de Marte por la Luna visible en México, América Central,         Colombia, Venezuela , Ecuador, Perú y Bolivia

 Julio 7 –   Conjunción de la Luna y Saturno

 Julio 28 –   Lluvia de meteoros de las Delta Aquaridas

Agosto 2 –   Conjunción de la Luna, Marte y Saturno

 Agosto 4 –   Conjunción de la Luna y Saturno

 Agosto 12 -  Lluvia de meteoros de las Perseidas

 Agosto 17 –   Conjunción de Venus, Júpiter y el Cúmulo de La Colmena en Libra

Septiembre 27-  Conjunción de la Luna y Saturno

Octubre 8 –   Eclipse total de Luna visible en América, Asia y Australia

 Octubre 21 –   Lluvia de meteoros de las Orionidas

 Octubre 23 –  Eclipse parcial de Sol visible en América del Norte

 Octubre 25 –  Conjunción de la Luna y Saturno

Noviembre 17 –  Lluvia de meteoros de las Leónidas

Diciembre 13 –  Lluvia de meteoros de las Gemínidas

 Diciembre 22 - Lluvia de meteoros de las Ursidas

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